viernes, 26 de febrero de 2010

reflexiones acerca del Holocausto...

El Holocausto...es dificil encontrar palablas para calificar semejante horor. Una locura. La terrible verdad. Viendo estos documentales (puestos a continuación) me averguenza formar parte de la especie humana. ¿Quienes somos? ¿qué especie de monstruo haría tal cosa? ¿Como es que la gente segue creyendo en dios despues de esto? Si dios existiera, y creo que con el Holocausto queda claro que no, y fuera inteligente, se alejaría de la raza humana. "Raza", es curioso como una simple palabra pueda hacer tanto daño...Sinceramente no puedo ni hablar de este terrible succeso, las palabras e imagenes de cuerpos esqueleticos y desnudos apilados en el suelo se entrecruzan en mi mente y forman un nudo en mi garganta. Es indescriptible...simplemente hay que verlo. Creo que no deberíamos jamás olvidar de lo que somos capaces y por esto pongo estos videos. El ser humano es la criatura más abominable, cruel, monstruosa, terrible y peligrosa que existe en el universo y esta es la cruda realidad. No hay infierno....estamos en él. La verdad es que la paz, no es lo normal, la normalidad, no es lo normal. Lo normal para nuestra especie es la violencia. No deberíamos temer a nada, pues somos el animal más terrible del universo. El Holocausto fue la revelación más dura de la verdadera naturaleza del ser humano. El Holocausto duró mucho tiempo, un dia tras otro decenas de miles de personas se convertían en cenizas o se morían de torturas, macabros experimentos, frio, hambre, su cuerpos congelados y descompuestos en el suelo de los campos de concentración, las fábricas de muerte... No puedo entender ni como pudo pasar....Pero lo que me preocupa más es esta pregunta: ¿ porqué no se hizo absolutamente nada durante mucho tiemo para pararlo? Se supo la verdad mucho antes de que se tomó la decisión de acabar con todo...Los nazis fueron los responsables directos, pero esta última pregunta......¿dónde nos deja a nosotros, la humanidad?




















TRABAJO FINAL DEL CURSO: MADE IN CHINA



Sistema Económico Mundial
2009-2010











INFORME SOBRE CHINA







Grupo: 4.2
Gabriela Campara
Alberto Tello Rodriguez
Karina Priakhina
Beatriz Dueñas



ÍNDICE

1. Prólogo…………………………………………………………………………..…..3
2. Agradecimientos ………………………………………………………………....6
3. Datos curiosos ……………………………………………………………….......8
4. Método…………………………………………………………………………......11
5. Cultura ………………………………………………………………………........13
a. Introducción………………………………………………………………..13
b. Confucionismo…………………………………………………………….13
i. Confucio y sus seguidores………………………………….13
ii. El canon confuciano…………………………………………14
c. Ideología e imperio………………………………………………………..15
d. Creación y descubrimientos…………………………………………….16
6. La política exterior china en la era de la globalización ……………..18
a. Características generales ……………………………………………….18
b. Relaciones con Estados Unidos ……………………………………….18
c. Relacione con la Unión Europea ……………………………………...19
7. China y el Estado de Bienestar………………………………………………21
8. Economía china: mano de obra, ecnología y exportación…………...23
a. Introducción general …………………………………………………….23
b. China: pasado, presente y futuro …………………………………….24
i. Período imperial……………………………………...…................25
ii. El período de la humillación extranjera
(siglos XIX y XX) ………………………………………………..26
iii. Las 3 primeras décadas del régimen comunista…….………..26
c. La reforma de 1978 y sus repercusiones hoy en día……………...27
d. Régimen económico actual……………………………………………..28
i. Transformación tecnológica……………………………………………………..30
ii. Reforma del sistema educativo……………………………32
e. La posición de China en el panorama global……………………….33
9. Conclusiones……………………………………………………………………...35
10. Bibliografía ……………………………………………………………………..…42






















PRÓLOGO

Con este trabajo pretendíamos, al menos en principio, comprender la realidad social, política y económica china y su posición en el actual marco global. Para ello consultamos un amplio abanico de temas relacionados con el contexto chino. Desde un principio abordamos temas económicos, sociales, políticos y culturales que configuran la complejidad de este gran país.
A medida que avanzábamos, nos fuimos dando cuenta de que por un lado contábamos con abundante información que modificaba nuestros planes de trabajo, lo que nos dificultaba concretar una hipótesis. Por otro lado también vimos que hay poca información fiable, especialmente procedente de dentro del país.
Comenzamos aplicando al caso chino marcos teóricos tradicionales para darnos cuenta de que no se ajustaban 100% a la realidad china. Pronto llegamos a la conclusión de que China es un caso único y que por tanto necesitaría un tratamiento único. Así pues, dedicamos nuestro trabajo a descubrir, comprender y describir la realidad política y social china (según la información que habíamos recabado).
Finalmente estructuramos el trabajo de la siguiente manera: primero procuramos comprender la cultura china como base de la realidad socio-política y económica de la actual china. Así, entendimos que creencias milenarias, como el confucionismo, han contribuido a la construcción del actual sistema del Gran Dragón. Por otro lado, los valores familiares y sociales siguen teniendo un importantísimo peso dentro de la política y la economía chinas. Precisamente estos valores son los que han favorecido la coexistencia de ideologías que serían antagónicas en otros contextos (véase, comunismo y capitalismo). La cultura ha sido, es y será el pegamento del gran rompecabezas asiático, a la vez que he servido (y continuará sirviendo) de elemento legitimador para las autoridades. El ejemplo más esclarecedor es la mentalidad generalizada que prima valores colectivos (trabajo duro, beneficio nacional) por encima de valores individuales. Probablemente éste sea el elemento clave, o uno de ellos, del éxito chino. Una vez establecidas estas bases, comenzamos a analizar la realidad político-social y económica china desde esta perspectiva.
Al estudiar los aspectos políticos, y más concretamente la política exterior, descubrimos que para el Estado chino priman los intereses nacionales sobre los asuntos internacionales, buscando siempre el máximo beneficio propio. Por esta razón, la política, tanto interna como externa, gira entorno a su propio progreso. Un segundo aspecto que caracteriza la política exterior china es la no ingerencia en conflictos internacionales. Tal vez por esto mantiene buenas relaciones con EEUU y muy buenas relaciones con la UE, con la que parece que se complementa.
En el plano económico, a pesar de las penosas políticas de crecimiento llevadas acabo durante los primeros años del comunismo, China ha conseguido despegar espectacularmente. Hoy en día es un actor muy importante en el mercado global, hecho que ha provocado más de un debate en la política y economía mundiales, revolucionando el panorama internacional. Como bases de este desarrollo hemos establecido dos aspectos fundamentales: la gran capacidad productiva y la adaptabilidad de la misma; y el traspaso de tecnología sin precedentes, que se ha venido dando desde la colaboración con la URSS pero que ha tenido su cénit en la apertura económica, con la llegada masiva de inversión extranjera. En pocas palabras, la apertura del mercado chino les permitió mezclar lo mejor de ambos mundos (capitalismo y comunismo).
A pesar de los grandes avances, China aún tiene pendiente el tema de derechos humanos y de desarrollo del Estado de Bienestar, por eso incluimos un informe oficial sobre el Estado de Bienestar. Estos temas siguen siendo deficitarios a pesar de la continua colaboración entre China y U.E . El informe citado constituye un buen ejemplo de cómo las autoridades chinas manejan la información.
En definitiva, hemos llegado a la conclusión de que China es una paradoja, un mundo de ambigüedades donde coexisten elementos, en principio incompatibles, en casi perfecta armonía. Sin embargo existe una gran brecha entre la economía modernizada y la realidad social precaria, donde la política actúa como un elemento controlador y unificador. Detrás de los éxitos económicos encontramos un panorama desolador de pobreza rural, desequilibrio económico, falta de derechos humanos e individuales y un largo etc. Es evidente que China ha triunfado económicamente, pero el precio pagado por su pueblo es enorme.
¿A dónde nos conducirá pues el milagro chino? Está claro que podemos tener una imagen aproximada de actual realidad china, pero es importante que usemos esta imagen para intentar discernir el camino que va a seguir China.


AGRADECIMIENTOS


El presente trabajo ha sido todo una inspiración que no podríamos haber logrado sin la ayuda de algunas personas y sus valiosas contribuciones. A ellos pues dedicamos nuestra obra. Para empezar a nuestro profesor de Sistema Económico Mundial quien nos ofreció la oportunidad de dar rienda suelta a nuestra creatividad y que nos ha guiado durante todo el proceso. Quien nos abrió horizontes académicos nuevos y excitantes, quien nos motivó e inspiró, gracias a él por esta oportunidad única. También damos las gracias y dedicamos nuestro trabajo a los demás equipos de nuestra clase que nos han servido de apoyo valioso y de ejemplo a la hora de tomar decisiones importantes. Sus trabajos y exposiciones también contribuyeron al nuestro. A cada uno de los alumnos del grupo 4.2 y al grupo como totalidad por el ambiente agradable que crearon y que mantuvieron a lo largo de todo el curso, por los interesantes debates que surgieron, por las aportaciones originales, por sugerencias, por el ambiente de trabajo, por la colaboración y solidaridad mutua, por todo esto y más. Agradecemos además, a nuestros entrevistados que prefirieron permanecer en anonimato (y cuya decisión respetamos) que nos ofrecieron una ventana hacia la verdad de lo que pasa en China. Gracias a sus testimonios y opiniones hemos podido juntar las piezas de este enorme rompe cabezas. Agradecemos también a nuestra colaboradora y amiga desde China, Aziza Mamatukova, sus valiosas aportaciones, correcciones y explicaciones. Nos reveló la verdad de la situación universitaria en Beijín donde estudia economía en la Universidad de Beijín. Gracias a todos ellos ya todos los demás que de una u otra forma contribuyeron a nuestro trabajo, a todos ellos dedicamos este informe.



DATOS CURIOSOS


i En 2003 se enviaron más de 6 billones de mensajes de texto en Año Nuevo chino.

i Más de 3 000 edificios en Shanghai tienen más de 18 pisos.

i China es uno de los países más corruptos de Asia.

i China posee el sistema más elaborado y eficaz del mundo de omisión de la verdad.

i Muchos datos estadísticos están declarados como secreto del Estado por el gobierno chino.

i Los camareros en China llenan sistemáticamente más las copas de los hombres que las de las mujeres que los acompañan.

i Hasta 2002 no existía ninguna ley que protegía la propiedad privada de los ciudadanos chinos, ni siquiera sus cuentas corrientes.

i Los chinos dicen que la policía en Europa es mucho más amable que en China.

i El que las autoridades tengan que justificarse o explicarse ante la población es considerado algo disparatado entre los habitantes chinos.

i El arresto representa un signo de culpabilidad, el eventual juicio es una mera formalidad en China.

i Los usuarios de móviles prefieren los mensajes de texto frente a llamadas.

i El efecto “copycat” hace que invertir en China sea arriesgado ya que a la semana de establecer una fabrica en el territorio chino aparecerá otra justo al lado produciendo exactamente lo mismo pero a menor precio.

i El gobierno chino controla los bancos y la bolsa.

i La mayoría de los trabajadores de fabricas que trabajan en cadenas de montaje son mujeres.

i Para muchas mujeres trabajar en las fabricas representa una mejora de calidad de vida.

i En China se considera que la corrupción del gobierno es un efecto secundario (inevitable) de la modernización.

i Los sobornos son una práctica comun en todas las esferas sociales en China.

i Muchos ciudadanos chinos visitan la tumba de Mao a diario donde depositan en una cesta gigante flores de loto compradas en la tienda adjunta. Una vez llena la cesta, las flores se vuelven a llevar a la tienda donde se revenden de nuevo.

i Muchos taxistas llevan una imagen de Mao en el coche.

i Los juguetes eróticos están prohibidos en China, pero la gran mayoría de estos juguetes se fabrica en territorio chino.

i En China existe un sistema de pasaportes que hace que trabajar fuera de su lugar de origen sea ilegal.

i Estornudar o sonarse la nariz en público esta muy mal visto en China, en cambio escupir (en caso de los hombres) no lo es tanto.

i En algunas universidades de China los estudiantes no pueden elegir su especialización, esto lo decide el gobierno.

i “Proteger a los niños de pornografía y otros contenidos dañinos” es el argumento que utiliza el gobierno chino para la censura en Internet. La llamada “presa verde” que filtra los contenidos de las paginas web.

i China produce el 70% de los juguetes de todo el mundo, el 60% de las bicicletas, la mitad de los zapatos y una tercera parte de las maletas.

i En 2002 China exportó una cantidad de ropa por valor de 70 000 millones de dólares, para 2005 era el primer proveedor de Estados Unidos.

i De cada 10 cosas producidas en el mundo, 3 son chinas.

i Cuando están resfriados llevan mascarilla para no contagiar a los demás.

MÉTODO


Durante la elaboración de este trabajo hemos seguido un método de trabajo en grupo. Nuestro método, hay que admitirlo, ha sido un poco desordenado al principio, pero hemos ido aprendiendo con los errores y el presente informe es el resultado de un trabajo coordinado. Empezamos por una revisión amplia de la literatura existente sobre China. En Esta etapa nos hemos topado con, llamémosla así, la gran muralla china de la censura de la información. Además, hemos llegado a ver que los datos procedentes de las fuentes oficiales chinas eran muy poco fiables y no correspondían a la realidad. Nos hemos tenido que atener pues a fuentes externas. La cantidad de cuestiones que hemos podido considerar es enorme, nos hemos visto desbordados por la multitud de posibilidades teóricas. Finalmente conseguimos acotar un terreno de estudio y unas pautas teóricas. Tras haber considerado, sin éxito, la aplicación de algunas tradiciones teóricas existentes al caso chino, nos hemos decidido a guisar nuestro propio guiso y a aventurarnos en lo desconocido. Hemos establecido pues como objetivo, saber como funciona exactamente la maquinaria económica, social y política en China. Las fuentes consultadas son de lo más diverso, desde reportajes censurados en China, hasta documentales aprobados y la propaganda oficial, pasando por libros de autores occidentales y chinos, innumerables artículos de prensa, periódicos, informes, datos estadísticos, entrevistas a chinos residentes en España y en China, opiniones de expertos en Internet..etc. Esta diversidad se debe al delicado tema de censura que ya hemos mencionado y que representaba un sesgo para nuestro trabajo que esperamos haber superado al menos en parte. Al realizar las entrevistas nos ha sorprendido de nuevo hasta donde puede llegar la censura y el miedo a represalias a la hora de decir la verdad e incluso la manipulación de la información que se lleva a cabo. Tras haber recabado la información necesaria y realizado las entrevistas, hemos establecido un plan de trabajo. Durante las siguientes etapas hemos estado siguiendo nuestro plan de trabajo mediante periódicas reuniones de grupo dentro y fuera de la facultad. Aquí surgió el clásico problema de ajuste de horarios de cada uno, y aunque conseguimos finalizar el trabajo a tiempo, permanece la sensación de que podríamos haber invertido más tiempo. Por otra parte, sabiendo que es un tema que nos interesó mucho desde el principio y que da mucho de sí podríamos pasarnos años investigando. Así ladrillo a ladrillo hemos acabado nuestra obra. En pocas palabras el método ha sido el de buscar información, elaborar reflexiones, debatir las reflexiones individuales para llegar a conclusiones comunes e ir redactando poco a poco el informe, corrigiendo y perfeccionando en grupo por el camino.


Cultura china

Introducciónn
Para entender la China de hoy es fundamental abrir la puerta de ayer y comprender los aspectos históricos y culturales de esta civilización milenaria. Lejos de tratar de describir todas y cada una de la dinastías de la China antigua y de dar una información ardua de datos históricos y acontecimientos, lo que nos propusimos es dar un enfoque suficiente para entender la economía, la sociedad y la evolución en la China de hoy
Para definir y entender cualquier cultura se debe observar no sólo a la sociedad, sino que también debemos mirar lo que esta sociedad cree, las fuentes de las que bebe, los maestros a los que sigue como parte de un todo que hilvana lo que llamamos “cultura”.
Iremos pues dando un paseo por el confucianismo, el neoconfucianismo, los ritos, las artes y la filosofía, para dar paso en capítulos siguientes al pragmatismo de la China actual en contraste con la China un tanto, por qué no decirlo, esotérica de ayer.

Confucionismo
Confucianismo: Confucio de nombre Kong Qiu, fue un sabio de nacional en la historia de China, nació en el año 551 a.C y murió en el 479 a. C. Las tres enseñanzas de confucianismo, taoísmo y budismo chino constituyen la gran contribución de China a la historia espiritual y moral de la humanidad. El confucianismo influyó con sus principios al gobierno, la educación y las costumbres morales de China. Fue la ideología del gobierno imperial, tal y como se refleja en los ritos sagrados del emperador. También influyó en la ética social y familiar basadas en una jerarquía de relaciones y en los ritos de veneración de los antepasados. Detengámonos en Confucio para saber más sobre este ilustre personaje pues hablar de cultura china es hablar de Confucianismo.
1.Confucio y sus seguidores
Confucio se consideraba a sí mismo un transmisor de ideas más que un reformador. Buscó en el pasado ejemplos de prácticas que pudieran dar lugar a la armonía social y un gobierno benevolente.
Los textos antiguos le revelaron un código de ética y moral que alentaba la complejidad de la red de relaciones entre personas y la virtud de atender al deber personal por el bien común. Conformando el núcleo de las enseñanzas de Confucio hallamos un profundo sentido de ren (“humanidad”) que significa actuar con sensibilidad y conciencia. Para Confucio, la relación básica era la existente entre padre e hijo. La dinámica de esta relación fundamental se veía reflejada en otras relaciones, como las de entre marido y mujer o soberano y ministro. La igualdad completa sólo era posible entre amigos. Virtudes como la humanidad, rectitud y sinceridad son esenciales en el confunianismo.

La familia tradicional china, estaban encabezadas por el varón de más edad de la generación mayor, al que sucedía el hijo mayor, y así sucesivamente a través de generaciones. El mayor de cada casa tenía prioridad sobre el joven. El ideal de vida familiar debía contar con cuatro generaciones viviendo bajo el mismo techo. En la práctica era habitual que varios hijos viviesen en el mismo recinto familiar. La novia dejaba su propia casa para formar parte de la familia del esposo. La familia incluye a los antepasados, que constituyen en todo momento miembros presentes y vitales del conjunto familiar. Engendrar herederos varones es un elemento fundamental, tal y como expresara Confucio: “Existen tres maneras de mostrarse irrespetuoso con la familia y, una de ellas, no engendrar descendientes es la más grave”. Si era imposible de la manera tradicional entonces la familia debía recurrir a la adopción, en el caso de las familias más ricas al concubinato.
Confucio creía que había que estudiar y practicar los li, rituales que no eran sino expresiones cristalizadas del ren manifestadas por personas dignas del respeto del pasado. Creía que los li eran tan poderosos que, si se practicaban con sinceridad, podían provocar una transformación del ser, que a su vez acabaría influyendo en el cosmos.
El pensamiento de Confucio se centraba en la esfera humana; no obstante, también propugnaba fe en el cielo, y en la misión que éste le había confiado: llevar la rectitud al mundo.
2. El canon confuciano
Los textos clásicos conforman la base de la ética, práctica y búsqueda confucianas. En tanto que textos centrales de las oposiciones imperiales, fueron memorizados por todos los aspirantes a funcionarios. Muchos de sus frases y aforismos pasaron a formar parte del lenguaje común y se hicieron familiares tanto entre los analfabetos como entre las élites refinadas.
Conformando el núcleo del canon confuciano están los “Cinco clásicos” y los “Cuatro Libros”. Los primeros son textos de Confucio, que solía enseñar a sus estudiantes (la palabra china para “clásico” significa literalmente “urdimbre”): el clásico de los cambios (Yi Jing), el clásico de los documentos (Shu Jing), el clásico de la poesía (Shi Jing), el Registro del ritual (Li Ji) y los Anuales de la Primavera y Otoño (Chunqiu). Hay un texto clásico al que se hace referencia, el Clásico de la música (Yue Jing), perdido durante la dinastía Han. La tradición designa a Confucio como recopilador de estos escritos, si bien se sabe que se compusieron y se modificaron a lo largo de varios siglos, en concreto hasta la época de la dinastía Han. Los textos tratan de diversos temas: adivinación y metafísica, anécdotas históricas y proclamas, etiquetas y rituales.
Lo más importante desde la perspectiva confuciana eran las lecciones morales que podían extraerse a partir de la lectura cuidadosa de esos textos. Los confucianos interpretaron su contenido como lecciones para vivir mejor en general pero sobre todo moralmente en un gobierno en particular. El Clásico de los cambios describía la estructura metafísica del universo y la relación entre los humanos y el cosmos; El Clásico de los documentos proporcionaban lecciones y modelos de gobierno procedentes de una edad dorada; el Clásico de la poesía ofrecía un mapa para comprender los corazones de las gentes; el Registro del Ritual era una guía para conseguir realizar acciones apropiadas y, por último, los sutiles análisis sobre liderazgo benevolente realizados por el propio Confucio.
El Gran aprendizaje enseña que el primer paso para lograr el orden social es el cultivo y refinamiento del individuo, y reivindica el ideal del soberano íntegro desde el punto de vista moral. El tema principal de la Doctrina del centro es la interrelación del cosmos y la moral humana, la idea de que los seres humanos y la naturaleza conforman una unidad a través de la sinceridad del esfuerzo.

Ideología e imperio
El confucianismo fue adoptado de forma oficial por la dinastía Han tras siglos de abandono. Hacia esa época, el pensamiento confuciano se vio alterado por diversas corrientes legalistas. El resultado de todo ello fue “confucianismo imperial”, una doctrina política que ponía el acento en el refinamiento moral del soberano, quien, como cabeza del estado fuerte y unificado, era parte vital del funcionamiento del cosmos.
El confucianismo siguió siendo el núcleo de la formación funcionarial tras la caída de los Han, aunque poco a poco el budismo y el taoísmo pasaron en convertirse en el centro de interés de intelectuales y del patrimonio imperial durante casi siete siglos. Han Yu (768-824 d. C) fue una importante voz discrepante, que afirmó que el taoísmo y el culto “bárbaro” del budismo habían pervertido la transmisión del “camino de los sabios”. Las diatribas de Han contra el budismo y el taoísmo le supusieron el exilio, aunque sería después admirado en siglos posteriores a causa de su firme defensa de la doctrina del gran sabio chino.
La dinastía Song fue testigo de una revitalización del confucianismo. Este movimiento, conocido en occidente como neoconfucianismo[1], fue parte de las respuestas a las cuestiones metafísicas tratadas por el budismo y el taoísmo, y su influencia es evidente. Los neoconfucianos rechazaron la desconfianza budista del mundo material y su enfoque del más allá, reivindicando la realidad material y la necesidad de trabajar para la mejora del estado y de la sociedad.
Las figuras preeminentes del neoconfucianismo son Zhu Xi (1130-1200), de la dinastía Song, y Wang Yangming (1472-1529), del periodo Ming. El primero propugnaba el estudio centrado en cualquier materia física o psicológica para comprender su qi. Las recomendaciones de Zhu, adoptadas tras su muerte, se tomaron como ortodoxia hasta el fin de la China Imperial. La filosofía de Wang desafiaba la de Zhu al sostener que para comprender el li basta con despejar la mente, de manera que puedan surgir el conocimiento intuitivo y la bondad inherentes de cada uno, y que el verdadero conocimiento radica en la acción más que en la comprensión intelectual. Las filosofías de Zhu y Wang fueron las influencias más importantes del confucianismo desde la época Song hasta el siglo XIX, cuando China se enfrentó a los desafíos procedentes de su encuentro con Occidente.

Creación y descubrimientos
1. La curación y medicina. Los orígenes de la tradición médica.[2]

Son muchísimos los especialistas que se han dedicado a interpretar a lo largo de los años los cánones de la medicina china. Evidencias arqueológicas revelan una importante tendencia hacia la innovación y la diversidad en la práctica médica china. Las diferencias regionales, así como factores políticos y sociales, han condicionado la manera en que se ha creado e interpretado la medicina clásica. Aunque la mayoría de las fuentes escritas chinas ofrecen descripciones limitadas acerca de una profesión médica elitista y predominantemente masculina, algunos textos mencionan cuestiones sobre la historia de una medicina popular y femenina.
Nuestro conocimiento de la práctica médica china durante los períodos de los Estados Combatientes y Han se basa sobre todo en anónimos tratados técnicos o filosóficos. Existen cuatro grandes colecciones de tratados cortos sobre acupuntura o moxibustión, que en su conjunto se conocen como Huangdi Neijing (Canon interno del emperador Amarillo). Se le conoce también como el “Padre de la Medicina”, vivió en 2697-2597 a. C.. Buena parte de la teoría médica contenida en Canon interno del emperador Amarillo se expone en forma de diálogo entre el propio emperador, representado como un benefactor de la filosofía natural, y su ministro Qibo, un especialista en acupuntura y otras materias esotéricas.
La rápida expansión del comercio en general y de la industria editorial en particular durante el período Ming conllevó una popularización del conocimiento médico. El contacto directo entre el médico docente y su discípulo perdió importancia con la difusión de importantes textos. Las familias hereditarias publicaban e impulsaban los escritos de sus antepasados para dejar constancia de tratamientos exitosos, así como demostrar cuestiones teóricas y nuevas técnicas. Finalmente, la literatura y las novelas de los periodos Ming y Qing nos proporcionan una intensa imagen acerca de la complejidad del mundo médico chino.


La política exterior china en la era de la globalización


Características generales
Antes de empezar a hablar de la política exterior china, cabe destacar la mayor importancia de los problemas internos sobre los externos. Esto no quiere decir que la política exterior china no tenga importancia sino que las actuaciones en materia internacional va en función de la política interior del país. Desde la perspectiva de Beijing su estatus internacional y su seguridad externa derivan de su propia estabilidad nacional y del desarrollo de su economía. Pero también es de vital importancia la relación que establezcan con el resto del mundo, especialmente con Estados Unidos y Europa.

Esta supremacía de la política interior sobre la política exterior viene dada por dos circunstancias clave que permitieron el cambio de la clase política china y un consecuente cambio de rumbo en la actuación del país. La primera de ellas sería el ascenso al poder de una nueva clase dirigente tras el XVI Congreso del Partido Comunista Chino en noviembre de 2002. La segunda circunstancia fue la incorporación de China a la organización Mundial del Comercio.

Destaca también en la política exterior china su tremenda pasividad. Esto queda claro al observar la actitud de Beijing con respecto a la guerra de Irak y la crisis nuclear planteada por Corea del Norte. Las prioridades chinas quedan entonces bastante claras: buscar la modernización económica y militar de China mediante la asimilación de capital y tecnología extranjeros, y evitar el alineamiento otras potencias.



Relaciones con Estados unidos

Las relaciones diplomáticas entre estos dos países son de las más importantes del panorama internacional por ser dos grandes potencias tanto económicas como militares.
Intentaremos analizar esta relación mediante un breve y general recorrido histórico:
- Durante el gobierno del presidente Bill Clinton, China tuvo un rol protagónico dentro de la política exterior norteamericana. George W. Bush se propuso cambiar esta situación durante su administración. En la campaña electoral de 2000, Bush no dejó de referirse a la República Popular como “competidor estratégico” y habló de la necesidad de crear un nuevo equilibrio en Asia centrado en sus aliados tradicionales, Japón y Corea del Sur. Solo dos meses después de llegar al poder, el choque de un avión espía norteamericano (EP-3) con un caza chino sobre la isla de Hainan estuvo a punto de provocar un grave enfrentamiento entre ambos países. Sin embargo, este incidente demostró que ninguna de las partes deseaba un deterioro en sus relaciones. Washington dejó de definir a China como “competidor” y Beijing abandonó su retórica contraria a la hegemonía norteamericana.
Tras los atentados del 11 de septiembre se produjo un acercamiento entre los dos países que a día de hoy siguen siendo positivas. Desde entonces China ha dado su apoyo a Estados Unidos en cuestiones tales como las resoluciones pertinentes al Consejo de Seguridad contra el terrorismo.
Pero a pesar de estos acercamientos, Estados Unidos no baja la guardia al considerar a la República Popular de China una amenaza militar. Al contrario China ha criticado duramente la evolución de la lucha contra el terrorismo, como por ejemplo la invasión de Irak. La política nuclear y el desarrollo de un sistema de defensa antimisiles son otros de los temas que inquietan al gigante asiático.
Sin embargo, China tiene la voluntad de estrechar su relación con Estados Unidos, ya que busca aparecer como un miembro responsable de la comunidad internacional, y al igual que su contraparte norteamericana, se ha preocupado de mantener la estabilidad en el Asia central y meridional. Pero pese a la cooperación existente entre ambos países, China observa con inquietud como Estados Unidos refuerza su alianza con Japón y la India. En cuanto a defensa, Estados Unidos ha renovado sus relaciones con el Sudeste asiático y ha establecido bases en Asia central, lo cual ha causado cierta preocupación en el gobierno chino.
Desde el fin de la guerra fría, Estados Unidos ha sido y sigue siendo la potencia hegemónica del mundo y China lo sabe. Es consciente de que aún no puede competir con Estados Unidos en el área financiera y tecnológica y tampoco desea competir con ellos como potencia militar, pero busca establecer alianzas con otros países asiáticos para restarle importancia a los acuerdos bilaterales que establezca Estados Unidos en la región.

Relaciones con la Comunidad Europea

Las relaciones entre las dos partes comenzaron en 1985 con la firma de un importante acuerdo comercial y de cooperación económica. A partir de aquel año, y una vez superadas las secuelas de la revuelta de la plaza de Tiananmen en 1989, las relaciones se intensificaron notablemente.
A partir de 1995, las relaciones UE/China se fueron desarrollando sobre tres pilares:
- Diálogos políticos y de derechos humanos: el diálogo euro-chino sobre derechos humanos (1996).
- Relaciones económicas y comerciales
- Cooperación, que incluye asistencia técnica europea hacia China.
En los últimos años las relaciones han experimentado claras mejorías situándose en la actualidad como las mejores de toda su historia. Esto se debe a los continuos contactos diplomáticos entre ambas partes. La cooperación entre China y la Unión Europea en materia de economía y comercio, ciencia y tecnología, así como educación es otra de las cuestiones que han favorecido a la continua mejora de las relaciones.
Mientras que China, el país que evoluciona más rápidamente del mundo, adoptó la política de reformas y apertura, y ha conseguido logros destacables en el desarrollo económico con un mercado potencial emergente, la UE, con el mayor número de países desarrollados y con el grado más alto de integración en el mundo, disfruta de capital abundante, tecnología avanzada y experiencia en dirección. Las economías china y europea se complementan en lugar de entrar en conflicto, esto les ha permitido establecer una sólida base económica en sus relaciones.



China y el Estado de Bienestar


El crecimiento económico chino en los últimos años es una cuestión innegable. Este país es una de las economías más fuertes del mundo, pudiendo competir en los mercados internacionales con las grandes potencias.
China ya ha alcanzado una meta muy importante pero aún le queda mucho camino por recorrer en cuestiones que escapan a la economía. La cobertura estatal de las necesidades de los ciudadanos es una de los temas en los que este país está trabajando mediante estudios hechos por especialistas chinos. Tanto es así que las previsiones para el futuro son bastante halagüeñas.
China cuenta con grandes posibilidades de convertirse en un estado del bienestar en los próximos 40 años, que ofrecerá tanto asistencia médica como pensiones de jubilación, según un informe elaborado por un equipo de 208 expertos chinos. El objetivo se alcanzará en tres etapas; la primera, de 2008 a 2012, consistirá en crear una red de seguridad que incluirá un mínimo de subsidios de vida, seguro médico y pensiones para todos los residentes rurales y urbanos. De 2013 a 2020 el gobierno continuará mejorando sus políticas y medidas del bienestar para garantizar la estabilidad y sostenibilidad de la red de seguridad social y finalmente, de 2021 a 2049, perfeccionará las provisiones para "construir una sociedad socialista del bienestar con características chinas". El sistema de seguridad social incluye seguro social, prestaciones para la tercera edad, huérfanos y discapacitados, así como protección especial para soldados, auxilio social y subvenciones de vivienda. Imprescindible para el sistema, el seguro social por su parte cuenta con seguros para la tercera edad, el desempleo, asistencia médica, accidentes laborales y maternidad.

No obstante, debido a que la mayor parte de estos servicios está dirigida a los residentes urbanos, los 737 millones de habitantes en zonas rurales carecían de un sistema de pensiones adecuado y seguro médico. Por lo tanto, con el objetivo de incluir a esta población, el gobierno comenzó en la década de los 90 del siglo pasado a desarrollar un sistema de pensiones de vida mínimas, que en 2007 fue implementado en las 31 provincias, regiones autónomas y municipalidades de la parte continental de China. En agosto de este año, el número de beneficiarios alcanzó 38,23 millones. Un nuevo programa cooperativo de asistencia médica fue lanzado en 2003, cuya meta es ofrecer servicios médicos básicos a los residentes rurales. Actualmente, el esquema cubre el 91 por ciento del total de campesinos y el 98 por ciento de áreas agrestes. El informe de los expertos sugiere integrar el programa cooperativo rural con el sistema del seguro médico urbano, y también exhorta al gobierno a establecer un sistema de pensiones para la tercera edad de los campesinos. Zheng Gongcheng, profesor de la Universidad Renmin de China y director del equipo de investigación, afirmó que el proyecto, respaldado por el Ministerio de Recursos Humanos y Seguridad Social y el Ministerio de Asuntos Civiles, fue iniciado en mayo de 2007. Más de 200 funcionarios se unieron al equipo para discutir el escrito, para cuya elaboración se realizaron investigaciones de campo en más de 11 provincias, regiones autónomas y municipalidades, y hasta se estudiaron las prácticas del extranjero, agregó Zheng. Asimismo, el académico expresó su esperanza por que el informe, que incluye planes de acción, sirva de plano para el sistema de seguridad social de China y constituya un punto de referencia para el gobierno[3].

Economía china:
mano de obra, tecnología y exportación
Introducción general
En las últimas décadas, China no ha dejado de crecer económicamente de forma espectacular. Ha pasado de ser una economía agraria centralizada y planificada a ser una gran economía exportadora a nivel mundial basada en el uso intensivo de mano de obra barata, el desarrollo y fabricación de tecnología media-baja y una alta capacidad de producción. La intención tanto del gobierno como de las empresas chinas es entrar a formar parte del grupo de países desarrolladores, innovadores e independientes emulando, y quién sabe si superando, a las principales potencias industriales. Por ahora China es ya el líder mundial en artículos de uso intensivo de mano de obra (produce el 70% de los juguetes del mundo, el 60% de las bicicletas, la mitad de los zapatos y una tercera parte de las maletas), en la producción de teléfonos móviles y uno de los principales fabricantes de chips de ordenador y aparatos de telecomunicación y dentro de no mucho lo será de aviones comerciales y automóviles.
La inundación de productos chinos está presionando a los fabricantes de otros países que confiaban en las marcas de fábrica y en el impacto del país de origen. Además, muchos de los productos que la producción china domina, como relojes de pulsera o bicicletas, han sufrido bajadas en los precios reales, hecho del que se ha beneficiado de forma directa el consumidor, a la vez que la liberalización de patentes ha permitido acceder al consumidor a artículos que antes no podía permitirse. Pero en todo este proceso China no es la única que tiene parte de responsabilidad, sino que el florecimiento de tiendas minoristas (como Wal-Mart en Estados Unidos, hoy en día el mayor minorista del mundo) que venden con fuertes descuentos, han contribuido a que los productos chinos sigan llenando las estanterías. Así, estos minoristas pueden continuar ofreciendo precios muy bajos y las marcas chinas pueden darse a conocer aprovechando el nombre del minorista y la gran escala de sus operaciones. Evidentemente esta situación repercute de forma muy importante en las fábricas nacionales y los trabajos que éstas ofrecen. Es muy posible que las mayores consecuencias las sufra el consumidor estadounidense y por ende, el panorama social y político.
Pero, ¿qué ha conducido a China a esta posición en los mercados globales? ¿Qué hace a China tan especial? Las características más importantes de China y que han contribuido en mayor medida a su fuerte ascenso no son sólo su gran base poblacional, su enorme economía ni su rápido crecimiento. Lo excepcional es una combinación única de su herencia cultural, sus instituciones, sus aspiraciones y la mezcla de recursos, capacidades y poder negociador. Además, ha sabido aprovechar el momento de la rápida globalización, la aparición y consolidación de poderosas organizaciones internacionales, como la Organización Mundial del Comercio, la realineación geopolítica tras la caída de la URSS y las reestructuraciones económicas en los países industrializados.
China es única. Única porque es el único país comunista que ha logrado crecimiento real rápido y sostenido. Es la única economía emergente en un contexto autoritario, de control de los derechos individuales y de la libertad de expresión. Es el país en desarrollo que recibe la mayor cantidad de inversión extranjera (casi más que todos los demás juntos) y que atrae más dólares de inversión que cualquier otro mercado (subdesarrollado o desarrollado). A diferencia de otros países, la transferencia de tecnología no tiene comparación y al contrario que sus vecinos Japón y Corea, China no parece que vaya a abandonar el uso intensivo de mano de obra al ascender por la escala, sino que multiplicará la eficacia de esas industrias de tecnología media para financiar una importante y fuerte incursión en las áreas de uso intensivo de tecnología que impulsarán la futura economía mundial. Y por encima de todo esto, China es tremendamente ambiciosa y resuelta a alcanzarlas.

China: Pasado, presente y futuro

La escena económica y comercial china tiene hondas raíces en su tradición. Entender el pasado de China es crucial para entender al gigante asiático de hoy día e incluso nos permite imaginar el rumbo que seguirá China. Son tres los momentos fundamentales de la historia china que nos pueden ser útiles para comprender el país:
1. El período imperial:
Aunque oficialmente repudiado por el régimen comunista, este período sigue siendo el punto de referencia para el país. En este período China se convirtió en gran potencia mundial, siendo durante largos períodos de tiempo probablemente la civilización más adelanta del mundo. El sistema imperial descansaba sobre el confucionismo, una filosofía cuasirreligiosa que, aunque llegó a ser la ortodoxia oficial, se incluía en un mapa complicado y muy diverso de filosofías y religiones tales como el taoísmo, el budismo, el legalismo y el modismo. De ahí que el confucionismo se dividiera en diversas escuelas, cada una influenciada por distintas corrientes, lo que a su vez permitió que los gobernantes pudieran afianzar sus actos sobre las bases que mejor les cuadraran.
Confucio consideraba que la sabiduría era la más importante de las actividades humanas y que sólo podía ser superada por la burocracia porque permitía a los sabios hacer valer sus méritos. A pesar de lo que pueda decir oficialmente el régimen comunista, han sobrevivido hasta nuestros días varios elementos confucionistas, como la disciplina, la estabilidad, la devoción por los altos estudios y el prestigio del servicio al Estado. No hay que olvidar el papel del legalismo, especialmente en la corte, que servía de guía para muchos, y que prescribía un sistema de reglas y obligaciones codificadas e impuestas rígidamente.
Las enseñanzas de Confucio junto con el legalismo fueron la base de la burocracia imperial, que fue desarrollando e implementando principios organizativos y operacionales que de una forma u otra han sobrevivido hasta nuestros días. Uno de esos principios era el sistema de exámenes con base en el mérito que más tarde sería el modelo para el servicio civil en Europa. Este sistema de exámenes permitía a cualquiera acceder a la burocracia e incluso a los puestos de más alto rango y poder siempre que estubiera adecuadamente cualificado .
La burocracia era un sofisticado sistema de múltiples ministerios que se extendían por todos los niveles (central, provincial y regional) y que además de manejar el poder suponía un contrapeso al poder imperial. Gracias a esta extensa burocracia, el emperador podía mantener el control sobre un reino tremendamente grande que no contaba con transportes y medios de comunicación.
Todo este pasado imperial aún tiene un fuerte peso en el país actual, cosa que se puede apreciar en:

· Fija unas aspiraciones extremadamente elevadas, cuya meta última es restaurar su posición como una de las principales civilizaciones.
· La tradición de control burocrático de la actividad económica estableció el principio de que el interés nacional va por delante de las reglas económicas. El régimen burocrático implica también que no hay una separación de poderes y de hecho, el legislativo y el judicial son instrumentos del ejecutivo.
· Persistencia de poderes locales que compiten entre sí por el poder y sobretodo con el gobierno central.
· La corrupción se tolera hasta que resulta excesiva y se reprime.
· Se le da gran importancia a la legitimidad ideológica e histórica.


2. El período de humillación extranjera (siglos XIX y XX)
Las más importantes lecciones de este período de humillaciones fueron:
· Profunda desconfianza hacia las intenciones de los extranjeros y de las multinacionales que fueron el instrumento de su dominación. Cuando China vuelva a aceptar a firma extranjeras será con el ánimo de adquirir destreza y conocimientos.
· Como consecuencia de esta primera lección, China se dio cuenta de que no podía volver a depender de nadie y para ello era clave la tecnología. Esto se tradujo en continuos intentos por traspasar tecnología, ya fuera con incentivos a la inversión o repatriando personas educadas en el exterior.
· Se crea un fuerte vínculo entre la tecnología y la seguridad nacional y de hecho son muchas la empresas propiedad de las fuerzas armadas o en estrecha relación con éstas.
· Ha habido un notable esfuerzo por combinar la tecnología extranjera con los valores chinos, lo que a su vez ha dado a un paradójico sistema que presenta lo mejor de los dos mundos: la riqueza capitalista y la protección y el subsidio comunista.

3. Las 3 primeras décadas del régimen comunista:
En estas 3 primeras décadas, la República Popular se organizó como un sistema de planificación central según el modelo comunista.
El primer período (1949 a 1955-1956) fue de reconstrucción y transición. Se mantuvieron funcionarios expertos, lo que significó cierta continuidad y siguieron funcionando empresas extranjeras, aunque sus operaciones se vieron restringidas.
El segundo período (de 1955-1956 a 1958-1959) se siguió casi a rajatabla el modelo soviético, se importó tecnología e ideología soviética así como el sistema educativo. Cuando la URSS se retiró, China se dio cuenta de que podía manejar la tecnología pero no podría mejorarla.
Durante el Gran Salto Adelante (1958-1960) se intentó aplicar el maoísmo y pasar la producción a los campos, pero sólo consiguieron hambre y otras horribles consecuencias. Poco después, la Revolución cultural (1966) se lanzó contra los intelectuales y los funcionarios más antiguos y disolvió el sistema educativo y gran parte de la economía organizada. Sus consecuencias aún se aprecian en una generación de administradores y empleados que carecen de una educación apropiada y que no asumen riesgos por miedo a cambios ideológicos.
Del período comunista han quedado importantes enseñanzas:
· La combinación ideología y economía es explosiva.
· La tecnología da un rendimiento rutinario y para conseguir un progreso constante es necesaria una transformación mental fundamental y una reorganización del sistema de producción. Aunque era evidente que para el control y el poder político era imprescindible mantener la burocracia, también era evidente que había que distanciarla de las actividades económicas y tecnológicas para poder progresar.
· La concentración de infraestructura y experiencia en localidades seleccionadas era necesaria.
· Para que la república subsistiera había que preocuparse de la marcha económica del país. Los líderes del partido no tenían que preocuparse por elecciones sino por las rebeliones que la penuria económica pudiera provocar. La prosperidad es especialmente crítica para un régimen que ha abandonado su base ideológica y confía en la prosperidad económica y el nacionalismo como único sustento de su legitimidad.

La reforma de 1978 y sus repercusiones hoy en día
Durante este período se trasladó el foco de inversión del turismo a la manufactura ligera; se pasa de la obligación a los inversionistas extranjeros a tomar un socio chino a un régimen de que las permite conservar la propiedad total de sus sucursales; y de un período de “puesta al día” a una etapa que busca la paridad global. Aquí comenzó la importación masiva de líneas de producción de occidente pero pronto se dieron cuenta de que para mejorar la competitividad también era necesario construir una infraestructura humana, educativa y organizacional y así poder mantener una producción compleja y crear capacidades.
Desde que empezara la reforma, el ritmo seguido ha sido cauteloso pero siempre in crescendo procurando mantener la estabilidad y lograr una transformación sostenible en todos los niveles (macroeconómico, empresarial e individual). Hoy día, las firmas nacionales del interior se han convertido en competidoras de las multinacionales y las mejores de ellas están preparadas para pasar al panorama global. Eso si, hay que tener en cuenta que estas empresas no sólo serás “juzgadas” por el propio mercado sino además por el poder político, que valorará su aportación a los intereses nacionales y su lealtad al partido. En toda esta cadena de empresas, las dedicadas a la investigación y desarrollo tendrán especial preferencia. Por otro lado, el sector servicios aún tiene que desarrollarse mucho, sobretodo porque hasta hace poco se mantenía cerrado a la competencia extranjera. El desarrollo del transporte y las comunicaciones es esencial para el crecimiento interno de la economía china y su incorporación al panorama global.
En general tanto los beneficios como las consecuencias negativas de la reforma han tenido una importante dimensión social al producir una mejoría general en el nivel de vida de la población mientras que en las zonas más empobrecidas apenas se ha reducido la pobreza. Además, la mayor disponibilidad de recursos ha generado una demanda de consumo diversificada que ya incluye bienes importados.
Entre todos los desarrollos y beneficios hay que tener en cuenta que también se han producido consecuencias imprevistas, especialmente en el esquema de organización social, que se ha complicado, y en las pautas de comportamiento y consumo, derivado todo esto de la occidentalización de la economía. Así, a pesar de que el nivel de vida haya subido y las zonas más empobrecidas ya no lo estén tanto, las disparidades en los niveles de renta son muy fuertes (se calcula que el 3% de la población china acumula el 40% del ahorro nacional). El origen de las disparidades regionales es el proceso de apertura y liberalización al pasar de un sistema agrario, cerrado y planificado a un modelo industrial abierto y descentralizado. La evolución de las zonas más prósperas supera con creces el nivel medio de la economía en su conjunto. Por ello el gobierno está implementando las primeras medidas: por un lado se procura crear un sistema de seguridad social de carácter urbano y por otro lado tiene la intención de reducir los privilegios fiscales de las zonas especiales para fomentar las inversiones en las zonas interiores.
A empeorar este desequilibrio contribuyó la creación de las Zonas Económicas Especiales que, a pesar de ser necesarias para impulsar la economía, han concentrado en su territorio la mayor parte de las mejoras introducidas por la reforma. Como consecuencia de esto, la migración rural es elevada y gira entorno a las grandes ciudades a la espera de conseguir trabajo que les permita integrarse en el nuevo modelo de vida chino. Pero el sobreempleo en el medio rural y la falta de preparación de los campesinos altera el orden social de las ciudades, que no pueden absorber la llegada masiva de campesinos (la tasa de desempleo gira entorno al 9%). Además, a esto se suma que a finales del siglo pasado se redujo la plantilla de las empresas estatales deficitarias para aliviar el coste de las subvenciones, se redujo la plantilla de funcionarios en 4 millones como consecuencia de la reestructuración del aparato burocrático-administrativo, se expulsó a medio millón de soldados en la modernización del ejército y el avance tecnológico dio lugar al llamado “paro tecnológico” dejando 10 millones de desempleados.
Todo esto se agrava con la racionalización del intervencionismo social del estado, que está suprimiendo algunos de los costosos beneficios del socialismo.

Régimen económico actual


Primero tenemos que entender que la China de hoy en día es compleja social, cultural y políticamente. Ya no se trata de la China clásica sino de lo que hoy se denomina la Gran China: la República Popular, Hong Kong (a partir de 1977 se convirtió en una Región Administrativa Especial con su propia jurisdicción en comercio e inversión extranjera), Taiwan (tecnológicamente avanzada) y Singapur (predominantemente chino, centro manufacturero de alta tecnología y base de muchas multinacionales) y la gran diáspora china formada por gran parte de la élite comercial de Asia sudoriental y que llevan a cabo sus actividades en gran parte del mundo.
En segundo lugar, hay que tener en cuenta sus recursos y capacidades: actualmente son unos 1.300 millones de habitantes, lo que fomenta el atractivo por su gran mercado nacional, lo que a su vez le otorga un gran poder de negociación, exigiendo la transferencia de tecnología como condición para permitir la entrada de inversión extranjera y obtener concesiones sin precedentes. Su gran población no ofrece sólo un enorme número de obreros sino también de ingenieros, científicos y trabajadores cualificados, muchos de los cuales trabajan en centros de investigación y desarrollo financiados por el gobierno. Con respecto a la transferencia de tecnología es muy importante tener en cuenta que la legislación china acerca de la protección intelectual es realmente flexible. Desde hace ya unos años está aprovechando una masiva ola de inversión extranjera, compartiendo esos avanzados conocimientos con las empresas nacionales y “tomando prestada” la tecnología con el beneplácito de las autoridades.
Centrándonos más en la parte económica, podríamos resumir los puntos fuertes de la economía china de la forma siguiente:
Gran concentración de recursos humanos
Infraestructura económica avanzada que progresa a gran velocidad
Liderazgo en muchas de las nuevas tecnologías
Amplio capital (China, Taiwan, Hong Kong y Singapur poseen reservas de divisas extranjeras por un valor aproximado de 75.000 millones de dólares estadounidenses)
Posición comercial dominante (es un importante competidor en la fabricación en serie de productos que aún se producen en EEUU y Europa, como los electrodomésticos, a la vez que la competencia usa componentes fabricados en China).
Tiene en el territorio nacional bases importantes y sedes regionales de grandes multinacionales.
Conocimiento de los negocios globales.
La mano de obra barata o el salario mínimo no pueden competir con los 50 centavos de salario chino. Costes de transporte baratos, energía rápida y pronta reacción a los cambios de gustos del consumidor ya no son suficientes contra la competencia china.
China aún depende menos de las exportaciones que otros países como Malaisia o Bélgica, pero su dependencia va creciendo porque necesitará financiar sus crecientes importaciones de bienes de capital e insumos de producción y sobre todo evitar el desempleo (y su consecuente bomba social). Por la escala de su economía y su creciente dominio de muchos mercados, la continuación del esfuerzo chino por exportar traerá un desplazamiento hacia bienes básicos en mercados que antes confiaban en las marcas registradas y la reputación como medios de diferenciación. Hoy día, las mejoras tecnológicas y la eficacia gerencial han producido un descenso en los costes de logística, costes que no dejan de descender desde hace 20 años. Si a esto le unimos que China es líder de costes, los fabricantes extranjeros tendrán que igualar o mejorar el precio mínimo chino, que se sustenta no sólo de mano de obra barata y de subsidios sino también en el uso intensivo de falsificación y piratería para soslayar los costes de desarrollo. Esto deja pocas opciones a los manufactureros de los países industrializados:
a. Obtener de un productor chino componentes y subconjuntos para bajar el coste del producto terminado.
b. Trasladar las operaciones a China para rebaja costes y entrar en el mercado chino
c. Encontrar otra base de producción como India o México
d. Automatizar o mejorar la producción de cualquier otra manera
e. Las empresas amenazadas también pueden intentar entrar en la línea de productos de uso intensivo de tecnología pero encontrarán que las etapas que conducen a ello están atestadas por otras empresas con la misma idea.
En un marco general, dos son los elementos fundamentales que conforman la base del crecimiento chino: 1) la transferencia de tecnología y 2) la reforma del sistema educativo.
1. Transferencia de tecnología:
En 1949 comienza la transferencia de tecnología de la URSS, proceso en el que se invierten fuertes capitales y en el que la innovación es una prioridad. Pero esta transferencia se interrumpe en 1958 cuando Mao lanza el Gran Salto Adelante, retirando la tecnología de las empresas de gran escala para dársela a firmas en el interior, pequeñas y sin experiencia. El resultado de esto fue el caos económico y la hambruna. Poco después, con la Revolución cultural, se acaba con toda esperanza de reorganizar la estructura tecnológica del país al acabar Mao con los tecnócratas, convencido de que el poder de las masas podría con toda deficiencia de conocimiento. Los éxitos militares del momento convencieron al ejecutivo de que llegaría el éxito económico junto con el militar. Así, las fuerzas armadas hacían la mayor parte del trabajo de investigación, pero se centraban en una ciencia para mostrar su poderío e importancia. Por ello, en los años ’80 China lanzaba satélites al especio mientras que se sostenía sobre una economía predominantemente agrícola y una industria de los años ’50.
El problema fundamental de la investigación y la industria era que la estructura tecnológica estaba fragmentada, no se establecían conexiones entre las distintas especializaciones, aún se creía que la innovación podía hacerse por decreto… A pesar de todo esto, China tenía los conocimientos básicos y la capacidad para desarrollar aplicaciones industriales, en particular en la industria pesada, desarrollando así una gran capacidad para utilizar y adaptar tecnologías más viejas y en regiones seleccionadas, en particular en Shanghai.
Con la reforma del ‘78-‘79 y la apertura de la economía poco a poco empezaron a darse cuenta de que la tecnología era la clave de la modernización, del poder militar y del crecimiento y la prosperidad económicas, claro que siempre dentro de los marcos ideológicos del régimen, por lo que el avance siempre fue lento y gradual, lo que a su vez aseguró el éxito de las reformas.
La inversión extranjera tuvo una función clave en la transferencia de tecnología. Una de las primeras medidas fue dictar una ley que concediera prioridad a la inversión extranjera para actividades de uso intensivo de tecnología pero exigía incluir un socio chino. Estas operaciones conjuntas eran muy beneficiosas para China porque permitían el traspaso de tecnología de forma integral y es menos dañina para la sensibilidad nacionalista. Sin dudarlo fue una gran oportunidad para China porque era un país realmente atractivo para la inversión extranjera por:
1. El inmenso mercado doméstico hizo que muchas empresas extranjeras lo primero que vieran fuera a la gran masa poblacional (la ilusión de vender un cepillo de dientes a cada chino), y por tanto un amplísimo mercado, sin caer en la cuenta de que el mercado chino no es un mercado consumista regido por los mismos patrones que los mercados occidentales. Aprovechando esto, el gobierno chino pudo obtener tecnología a una escala sin precedentes en los países en vías de desarrollo.
2. Su mercado le permitía enfrentar a los inversionistas unos con otros y hacerlos convenir el intercambio de tecnología entre ellos. Por ejemplo, las empresas chinas conseguían tener acuerdos de operaciones conjuntas con empresas extranjeras rivales entre sí permitiendo al socio chino aprender las mejores prácticas de ambos y tener acceso a todos.
Para acelerar el traspaso de tecnología se concedieron incentivos y privilegios a la inversión en proyectos que requirieran uso intensivo de tecnología. A quienes ofrecieran las técnicas más avanzadas se les permitió instalarse en las mejores zonas, se les concedieron condiciones preferenciales en administración y capital, largos aplazamientos de impuestos, exenciones en el pago de derechos y recibieron acceso preferencial (o la promesa de) al mercado nacional. Pero no hay que olvidar que la transferencia de tecnología depende también en gran medida de la capacidad de los nacionales para asimilarla. Además, una vez traspasada, esa tecnología debe ser mantenida e incluso mejorada, por ello los gastos de China para la invención y desarrollo se triplicaron entre 1991 y 1999 (aunque siempre en función del crecimiento económico) y hoy día, el establecimiento de centros de I+D tiene prioridad en China.
2. Reforma del sistema educativo:
El sistema educativo había quedado destrozado tras la Revolución Cultural, algunos de los mejores profesores y científicos habían sido relegados al campo, la comunidad científica fue aislada y se perdieron los avances tecnológicos de la época, las instalaciones, los equipos y la motivación. El sistema imperial de exámenes y el sistema comunista habían restringido el acceso a la educación superior, de modo que una de las prioridades era ampliar la base de la educación superior. En 2000 las matriculaciones en educación terciaria eran del 11%, el doble que en 1990, pero apenas suponía en 24% de las matriculaciones totales en educación.
Con las reformas se ha ido reconstruyendo el sistema educativo, cimentando su importancia con la creación de una comisión de alto nivel sobre ciencia y educación presidida por el primer ministro. Otra medida fue reunir en torno a una industria (especialmente alrededor de las consideradas avanzadas, como las telecomunicaciones) diversos campos de estudios. Finalmente, muchas multinacionales ayudan a las universidades y centros de investigación más importantes, no sólo para mostrar su buena voluntad para con el interés nacional (crucial para poder desarrollar sus actividades en el país) sino además a modo de bolsas de trabajo, preparando a los graduados chinos.
Otro cambio importante fue aumentar la internacionalización, importando contenido, especialmente en ciencia, tecnología, derecho y administración, y el establecimiento de programas de intercambio para estudiantes y profesores. Pero esta medida no estaba bien vista por los sectores más conservadores, que tenían miedo de que esos estudiantes y profesores no volvieran, y si lo hacían sospechaban de ellos por haberse contaminado con ideas indeseables. Había que adoptar ideologías extranjeras sin valores extranjeros. Poco a poco la paranoia fue bajando, por lo que se fue descubriendo la importancia del papel de las “tortugas” (llamadas así por su tendencia a volver a su lugar de nacimiento). Sólo en EEUU en el curso 2002-2003 había 65.000 estudiantes chinos y 36.000 de Taiwan y Hong Kong. Entre 1986 y 1998 21.000 estudiantes chinos obtuvieron su doctorado en ciencias y en ingeniería en los Estados Unidos. Sólo con que haya un ligero aumento de la tasa de retorno (el 48% de los graduados en EEUU en 1998 aceptaron ofertas de trabajo allí) ya supondría una importante cifra de ingenieros que transmitirían sus conocimientos a los trabajadores nacionales.


La posición de china en el panorama global


El primer impacto del surgimiento chino ha sido más notorio en unos países que en otros, (por ejemplo, más en EEUU que en la UE) y se ha sentido más en las industrias de uso intensivo de mano de obra y en las áreas de tecnología baja-media que en las áreas de uso intensivo de tecnología. En EEUU China es líder en calzado, juguetes y muebles de madera para el hogar y se prepara para apoderarse de los tejidos y la ropa (al expirar el acuerdo sobre multifibras y al ingresar China en la Organización Mundial de Comercio). En 2002 se eliminaron las cuotas de maletas de fibras artificiales, el precio unitario cayó a la mitad y la participación china aumentó 5 veces en el mercado global. Sin embargo, los avances chinos en la industria de uso intensivo de mano de obra no afectarán a EEUU de forma particular, puesto que éste abandonó hace ya tiempo esas líneas de productos. Por ejemplo, sólo el 5% de los zapatos de lona y caucho que se venden en EEUU se fabrican en el país. El mayor impacto se sentirá en aquellos países industrializados que no han protegido sus productos o en los países en vías de desarrollo que se valían de los bajos salarios y la proximidad para mantenerse a flote.
Según la OCDE entre 1989 y 1999 la participación china en el mercado de ropa se duplicó, llegando al 20%. Para 2002 esas misma exportaciones de ropa habían alcanzado ya los 70.000 millones de dólares y en 2005 era ya número uno como proveedor de ropa de origen extranjero en EEUU. La clave del éxito no está en los bajos salarios (de hecho, no son los más bajos del sector) sino en que los costes por unidad son los más bajos debido a su alta productividad y a sus economías de escala. Además cuenta con numerosas industrias de apoyo y los grandes manufactureros están integrados de forma vertical, no dejando intervenir a extraños en la cadena de valor. Todo lo necesario se encuentra en un solo sitio, comodidad de la que no goza ninguna otra zona del mundo. Ha llegado a ser el proveedor predilecto por ser capaz de fabricar casi cualquier tipo de producto textil y prendas de cualquier nivel de calidad y además a precios competitivos (informa la ITC). Lo único en lo que aún fallan es la creatividad, pero por ahora lo sustituyen copiando modelos extranjeros.
Los más afectados no serán los países desarrollados que pueden trasladar sus recursos a sectores donde sean más competitivos, sino aquellos países que estén en vías de desarrollo, y especialmente los menos desarrollados, que tendrán dificultades para encontrar mercados alternativos. La exportación de textiles es crucial en las economías de Tailandia (donde suponen el 86% de las exportaciones), Lesotho (94%), Haití (85%), Honduras (65%) y otros muchos países. Y entre los desarrollados, la UE perderá 2.500 millones de dólares en exportaciones a EEUU, Italia perderá 1.200 millones de dólares y Canadá perderá 2.000.
Como ya hemos dicho en la introducción, la venta de productos chinos por parte de minoristas está a afectando a numerosos países, especialmente EEUU donde los manufactureros ven como se van minando sus medios de ganarse la vida. Se trata de un círculo vicioso que no sólo podría deja a muchos norteamericanos sin trabajo, sino que puede incluso provocar un rebote en los patrones de consumo de los nacionales a favor de “comprar estadounidense”, modificando la ecuación coste-reputación para incluir la conservación del empleo como una consideración básica. Aunque pueda sonar extraño, el consumidor norteamericano ya ha demostrado que su opinión geopolítica, sus aversiones y otras consideraciones no racionales pueden influir en él, como lo demuestra el descenso en el consumo de vino francés por la guerra de Irak o el hecho de que están dispuestos a pagar primas por productos europeos y japoneses aunque la calidad del producto sea idéntica (por ejemplo, pagan más por el producto Toyota que por el de General Motors a pesar de que ambos salen de la misma fábrica de operación conjunta).
Según algunos autores, y de forma esquemática, los impactos que puede provocar la entrada masiva de los productos chinos en el mercado global son:
· polarización de posiciones de las industrias que se ven beneficiadas (multinacionales con operaciones en China) y las que se ven perjudicadas (pequeñas y medianas empresas que no pueden dejar el mercado doméstico y trasladar la inversión a China) por el crecimiento de China, optando cada grupo por posiciones enfrentadas en cuanto a comercio y proteccionismo.
· Las negociaciones laborales pueden centrarse en la seguridad del puesto de trabajo, lo que traerá cambios en la afiliación y actuación sindical.
· Se abogará cada vez más por el proteccionismo y se minimizará el papel de los organismos internacionales
· Se iniciará el debate acerca de la economía racional.
La cuestión a la que se enfrentan las empresas, los empleados y los consumidores ya no es cuándo y cómo llegará China sino cómo hacerle frente. Poco a poco se crea un orden geopolítico completamente nuevo, empieza una guerra comercial donde el proteccionismo podría ser un grave error.




Conclusiones




A lo largo de los últimos meses hemos estado observando China, su política, su pueblo, su cultura, su evolución económica y la evolución de las opiniones acerca de China. Hoy por hoy constituye un tema de debate de mucha importancia para el mundo entero. Hay una multitud de enfoques, visiones y opiniones acerca del papel de China en el mundo, de su futuro y el del mundo entero. China se esta convirtiendo en un actor económico de mucho peso y esta nueva posición esta suscitando multitud de reacciones de lo más variado alrededor del globo. La pregunta más frecuente es ¿como afectaría el desarrollo de China al resto de nosotros? ¿Cómo debemos reaccionar?[4] Estas preguntas han recibido mucha atención por parte de políticos y economistas de todo el mundo, mucho se ha escrito acerca del futuro de China. Nosotros pues nos proponemos descubrir como funciona exactamente el sistema Chino para entender mejor como han llegado a este punto. De repente se habla del milagro Chino…pero ¿por que el milagro Chino es un milagro exactamente?
El caso Chino es un caso único y es una contradicción en muchos sentidos. En él coexisten sistemas que en principio se declaraban incompatibles como el capitalismo y el comunismo, la modernización y la ausencia de la democracia. Según lo que se ha escrito sobre el comunismo y el capitalismo son sistemas incompatibles. ¿Como explicar pues que en China coexisten y además funcionan a la perfección? La respuesta es más fácil de lo que parece. Y es que estas teorías, son solo esto, “teorías”. La realidad social, política y económica a la que se refieren es muchas veces otra.
Otra teoría que encuentra su excepción en China es la que declara que con la modernización tiene que surgir la democratización. Esta teoría puede que sea cierta para un numero de países occidentales, pero no se cumple en el caso que nos interesa. Una vez más la realidad no concuerda con las teorías tradicionales. Aunque el hecho de que los universalismos no existen es una verdad simple, suele ignorarse. Siempre intentamos ver el mundo exterior a través de nuestras particulares gafas teóricas, el resultado es, claro está, una visión borrosa que finalmente interpretamos con nuestras concepciones ideológicas propias terminando así de deformar por completo la realidad. El objetivo de todo investigador es la búsqueda de la verdad. Acercarse a la realidad de las cosas no es nada fácil. Por mucho que empleemos métodos y técnicas para validar nuestro trabajo, éste nunca llegará a ser objetivo por el simple hecho de que en las ciencias sociales no existe tal cosa. El único remedio que queda es pues ser sincero, es decir, señalar claramente que se trata de nuestra opinión personal. “La opinión personal” en los trabajos académicos suele tener una connotación negativa, lo cual es un grave error ya que no por ser personal es menos fundamentada. Para poder acercarnos a la realidad hay que tener en consideración una multitud de posicionamientos y razonamientos que existen sobre el tema estudiado, datos estadísticos, literatura, etc. Y esto es lo que hemos hecho en este trabajo. Después de meses de revisión de literatura y datos hemos llegado una serie de conclusiones, pero que no dejan de ser opiniones.
Llegados a este punto, tras descubrir que no podemos examinar China con los instrumentos tradicionales, nos propusimos sumergirnos en el mundo chino para entender su funcionamiento. Observando en todo detalle la actualidad China pudimos dibujar una imagen de cómo es el sistema chino y porqué, para poder aventurarnos a buscar nuestras propias explicaciones de la pregunta que nos ocupa. A saber, ¿cómo y porqué coexisten elementos en principio incompatibles en el seno del sistema político, social y económico chino?


El progreso económico chino es un hecho reconocido y temido en todo el mundo. Muchos han dado voz de alarma ante el crecimiento espectacular del peso económico y presuntamente político de China. Este tipo de reacciones no son una sorpresa. La nueva China amenaza con desestabilizar el delicado equilibrio mundial y el cambio sigue siendo uno de los mayores miedos de la humanidad. Y más aun para las actuales potencias económicas, o mejor dicho, la actual potencia económica (en singular ),(EEUU) que ve disminuir su influencia tanto en el campo de lo político como en el campo económico a nivel mundial y la hegemonía capitalista tambalearse ante un nuevo posible peso pesado. Desde el otro lado del Atlántico empieza a surgir una cantidad tremenda de escritos que propagan un mensaje paranoico a la población mundial sobre el carácter agresivo de China, sobre sus deudas a soldar, sobre su peligro para el medio ambiente, sobre su intención de imponer el comunismo. En definitiva, hemos resucitado al fantasma rojo. Los esteriotipos y los universalismos han vuelto a jugar aquí una mala pasada.
Para empezar el rojo chino no es el mismo rojo que el soviético, además la posición de China frente a los Estados Unidos sigue siendo más que cuestionable, es decir, no esta tan claro que China sea lo suficientemente fuerte como para rivalizar con la posición hegemónica de los Estados Unidos. Otros escritos tratan temas más prácticos de cómo convivir con los nuevos actores económicos (India, Brasil, China) aunque los planteamientos siguen empleando una lógica curiosa. Antes que hablar de convivencia se habla de “qué hacer frente a”, como si se tratara de una epidemia. Uno no puede evitar preguntarse si todo esto no son sino maniobras para tener la aprobación popular para controlar el crecimiento de posibles competidores en la esfera política y económica mundial. Parece ser que el mundo es demasiado pequeño para varios jugadores. Un modo más fácil de explicarlo es el modelo de suma cero. En efecto, es un hecho que la riqueza en el mundo es limitada y para que haya grandes y pocos ganadores tiene que haber una mayoría perdedora. La emergencia de nuevas potencias económicas amenaza con poner en cuestión la hegemonía existente y ésta, como es habitual, se siente en derecho para meter la nariz en le desarrollo de los demás. Pero como estamos en un mundo supuestamente democrático hay que resucitar al fantasma rojo para justificar los intentos de inmiscuirse en los asuntos ajenos para mantener así las apariencias y evitar los conflictos tanto internos como externos. El occidente teme al dragón rojo que amenaza con destruir su preciado modo de vida a saber, un consumismo excesivo y una masiva y permanente idiotización de la población. Pero esto es otra historia. Centrémo- nos en el caso chino. Si lo que pasa en China no es lo que pensamos ¿que es lo que pasa realmente?
La verdad es que en China a pesar de los espectaculares avances económicos de los últimos diez años sigue habiendo muchos problemas por resolver. China es un país de contrastes geográficos, económicos, sociales, y demográficos. Antes de lanzarse a conquistar el mundo, como parecen temer nuestros vecinos del otro lado del Atlántico, China tiene que suavizar por lo menos algunos de estos extremos. En el seno del país coinciden extremos de riqueza concentrada entorno a las grandes ciudades costeras como Shanghai o HongKong y pobreza extrema en las regiones rurales. Ciudades poblabas hasta no poder más y regiones rurales desiertas, es decir, una brecha rural-urbana muy pronunciada. Además los derechos sociales y políticos siguen siendo una negación en la totalidad del país. En su lugar se impone grandiosamente el partido único y un pensamiento único. Uno no puede evitar preguntarse como ha podido pasar tal situación sin que la población reclame cambios. Desde lejos China puede parecer un lugar sin ruido, pero no es así, la historia de este país esta marcada por sangrientas revueltas y manifestaciones reprimidas y aplastadas con brutalidad. Lo que no se hizo en una ocasión terrible en Rusia (el ejercito no disparó a los manifestantes de la plaza roja durante los disturbios en la antigua Rusia) sí se hizo en China, sin embargo el Gobierno chino se lo calló. Nos referimos a los disturbios estudiantiles en la plaza de Tiananmen en 1989 durante los cuales los soldados dispararon a muchos civiles y aplastaron a muchos más con los tanques, pero como todo esto pasó fuera de la plaza, en las calles cercanas fue silenciado como por arte de magia, un argumento un tanto absurdo. Sin embargo tras la revolución china las protestas se hicieron cada vez menos intensas, o eso parece. Ya que la instauración del partido único fue el resultado de una victoria revolucionaria se aceptó su legitimidad por la casi totalidad de la población. Pero si las revueltas no aparecen en los periódicos ni en las noticias no significa que no existan. El monopolio de la información del partido único le garantiza el control de la opinión pública lo cual es un instrumento clave de auto legitimación del gobierno.
En este sentido la sociedad china no se diferencia tanto de cualquier otra sociedad democrática donde reina, por regla general, la extrema ignorancia (un efecto colateral para decirlo de alguna forma de cualquier gobierno inseguro). Y es que el gobierno chino es muy inseguro, por ello quizá el control de la información es más intenso y más directo que en los países democráticos. En China todos los medios de comunicación están controlados por el gobierno y además la población en su gran mayoría se encuentra totalmente sumergida en problemas de supervivencia del día a día. Para profundizar sobre estas cuestiones y acercarnos a la realidad social china hemos realizado una serie de entrevistas a los inmigrantes chinos residentes en Madrid.
Al principio nos llevamos una desagradable sorpresa al toparnos con una pared de silencio. Nada más presentarnos y explicar lo que queríamos, recibíamos un No rotundo. Más adelante se reequilibro la balanza, pero aun así, parece ser que para algunos, la correa comunista se extiende desde China hasta España. De entre diez personas solo accedieron tres a ser entrevistados. Y algunos no se sintieron seguros para hablar hasta que no vieron que solo somos estudiantes y que no apuntamos absolutamente nada. En cuanto nos veían levantar un bolígrafo se echaban atrás. Pero finalmente aunque nos contaron muchas cosas, los relatos se contradecían y se entrecruzaban. Para algunos hoy se puede hablar de prácticamente todo en China, para otros hay ciertos temas tabú en cuanto a la política. Un joven que llevaba un mes en España nos advirtió que no se podía hablar de ciertas cosas aunque fuera por Internet. Este chico vino a España a estudiar español desde Beijín donde estudiaba comercio. Cuando le preguntamos porqué eligió estudiar comercio, nos dijo que él no fue quien escogió estudiar esta carrera. Dijo que como hay mucha gente que quiere estudiar en la universidad el gobierno los organiza y determina la especialización por ellos. Nos sorprendió muchísimo oír aquello, es decir, no les dejan estudiar lo que quieren. Aparte de eso, dice que la vida de estudiantes en Beijín es bastante buena ahora. Recuerda que cuando era pequeño no había casi ordenadores en su pueblo al noroeste de China, pero que diez años más tarde aparecieron de repente y ahora han invadido todo. “Hoy en día se vive muy bien en China y cuando termine de estudiar español pienso regresar para continuar con los estudios de comercio”. Para este joven, Mao fue un buen líder, sigue viéndolo como una figura positiva para su país, destacando la victoria frente a Japón. No mencionó ni la revolución cultural ni otras políticas desastrosas de Mao. Para este joven China hoy en día es un buen lugar, y ha mejorado mucho aunque el voto de las personas sigue siendo irrelevante. Reconoce que en cuanto a la política la opinión popular no pinta absolutamente nada. Dice que por hablar de política pueden hablar, pero que no sirve de nada.
Otra pareja mayor se vino a España hace más de 20 años, vinieron porque querían tener otro hijo, ahora tienen tres. Dicen que bajo Mao no se podía hablar, pero que las cosas han cambiado. Ahora China es un gran país y seguramente les iría mejor ahí, ya que aquí tienen una tienda que nos les da mucho beneficio. Dicen que las ventas han bajado mucho, que como no dejan vender alcohol después de las 22 y fijan los precios, y además la gente sólo compra golosinas es difícil mantener el negocio. Pero cuando les preguntamos si volverían a China, han dicho que les sería muy difícil volver, llevan mucho tiempo fuera. Cuando eran jóvenes, mucha gente se fue de China y ahora que han pasado 20 años, las cosas han cambiado mucho. Ven por la tele la china actual y dicen que esta mucho mejor. “Que ahora con el Internet los jóvenes se pueden comunicar más libremente y más fácilmente”. Los hijos quieren regresar a China para montar un negocio porque dicen que es más fácil en China que aquí.
Una mujer de unos 60 años nos ha confesado que la gente en España es mucho más maja que en China. Dice que ahora China esta mejor, pero cuando le preguntamos sobre como era antes, dijo sinceramente que no quiere hablar de política. De tres personas que accedieron a ser entrevistados solo dos hablaron de política y siempre con una pizca de tensión en el aire. Como conclusión, todos afirman que China ahora esta muy cambiada y mucho mejor, pero que si antes no se podía hablar de política ahora de poco sirve hacerlo. Las opiniones que hemos recogido confirman lo que ya pensábamos sobre China, aunque no pudimos descubrir mucho sobre la China actual ya que nadie se atreve a criticarla, sino que se concentran sobre la mejora económica. Están felices con los cambios, y por ello el gobierno les parece un buen gobierno porque poco a poco las cosas van mejorando.
Este tipo de mentalidad es un hecho generalizado en China, según lo que nos cuenta una estudiante de economía desde Beijín. Los jóvenes consideran que es inútil hablar de política y más cuando te puede causar problemas. La inmensa mayoría sigue influenciada por las generaciones anteriores y la mentalidad de que mientras haya un horizonte de esperanza y progreso el partido único esta legitimado.

¿Como funciona entonces el sistema chino y como logra incorporar elementos paradójicos tales como el comunismo, el capitalismo y la modernización sin su supuestamente correspondiente democratización? La respuesta tiene dos partes, por un lado la parte teórica y por otro la funcional. En lo que se refiere a la dimensión teórica del problema, la explicación es bastante simple pero que muchas veces es fuente de malentendidos de dimensiones inaceptables. Todos los conceptos mencionados anteriormente no son verdades universales sino que meramente denominadores aproximativos de diversas realidades sociales y políticas. Sería absurdo pensar que la democracia en Estados Unidos es la misma que en España, por dar un ejemplo, o que el capitalismo chino es el mismo que el capitalismo europeo. Y sin embargo estos errores se cometen a diario y son fuente de malentendidos cometidos incluso por gente tan ilustre como los altos cargos de gobiernos. Cada caso, como hemos mencionado anteriormente, es único. Y en cuanto al aspecto funcional, el capitalismo en China es compatible con el comunismo porque se han ajustado mutuamente para poder coexistir, y el resultado obviamente fue exitoso, (al menos para una parte de la población). El gobierno chino deja ciertas áreas de la economía libres al desarrollo del capitalismo, quien a cambio no cuestiona la autoridad existente. La modernización ha llegado con el desarrollo económico pero sin su correspondiente democratización ya que existen unos fuertes mecanismos de control de la opinión publica y de legitimación del poder que aseguran la pervivencia del partido único. Por una parte el fuerte control de la información proporciona propaganda nacional y evita la filtración del modelo de vida occidental para mantener la opinión pública favorable al modelo nacional. Por otra parte no existe ningún respaldo legal que pueda defender a los ciudadanos ante el Estado que tiene tanto el monopolio de la información como el monopolio de la violencia. Los que se atrevan a manifestar se encontrarán con brutales represiones. El cierto sentido, esta mezcla explosiva de modelos políticos y económicos funciona justamente porque falta la democracia. La ausencia de la democracia hace posible que el modelo de economía capitalista pueda encajar con el comunismo por encima de los derechos de la población y los estándares democráticos de bienestar social. Mientras no exista ningún tipo de cultura política en China no habrá problemas para el comunismo. Además las mejoras económicas no hacen más que favorecer una buena imagen del gobierno, “un gobierno eficiente y moderno”.

La situación actual de China es más frágil de lo que las autoridades se empeñan en hacerles creer a sus ciudadanos y al mundo exterior. Los datos estadísticos proporcionados por las autoridades chinas son poco fiables y muchas veces están revisados por el partido[5]. Es pues difícil saber la verdadera fuerza de la economía china, pero es indudable que crece. El panorama social sin embargo, es otra historia. Aunque parece que la travesía de China por el siglo XXI solo tiene cielo azul por delante, no es así. Las divisiones sociales se van agudizando en la sociedad china según va creciendo la brecha rural-urbana, la corrupción es la regla general en todo el territorio chino, y la brutal represión de la población y la negación de los derechos humanos siguen siendo los grandes protagonistas del siglo XXI[6]. Si siguen el camino del desarrollo seguido por los demás países es probable que tengan que pasar por alguna tormenta. Aunque el discurso nacionalista del partido único consigue desviar la atención de la población de las enormes insuficiencias sociales éstas están empeorando para la parte desfavorecida de la población. Son siempre los que menos tienen los que más pagan por las extravagancias de los pocos afortunados. En China existe un sistema de control omnipresente, represivo y brutal de la población. Por lo que aunque se produjeran revueltas como en el pasado estas serian reprimidas con brutalidad y eficacia ya que no existe ningún respaldo legal que pueda proporcionar protección a los ciudadanos ante el Estado. El sistema Chino funciona justamente porque le falta un elemento esencial, cuya ausencia hace de esta mezcla explosiva un sistema operativo. Este elemento es la democracia.
A pesar de los desastres provocados por el gobierno de Mao y el de su sucesor Deng Xiaoping (aunque a éste último se le suelen atribuir las mejoras económicas), China se ha levantado gracias a dos factores principalmente, a saber, la apertura internacional del mercado económico y las inversiones extranjeras (con todas las implicaciones que esto conlleva). Puede parecer que tras la crisis económica China ha salido ganadora, pero en realidad este no es el caso. No es que China sea ganadora sino que es la mejor parada de todos los perdedores de esta crisis. Es probable que las autoridades norteamericanas se preocupen por nada. China no les va a arrebatar la condición de hegemonía económica, ni tampoco se va a sustituir el dólar por el Yuan como divisa de reserva, pero sí tendrán que acostumbrarse a la mayor presencia de China en todos los ámbitos e incluso en su propio territorio.


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[1] NEOCONFUCIANISMO: “Limpiar el espejo de polvo”
La cosmología neoconfuciana describía un mundo compuesto de “li” (“principio o pauta” que no es la misma palabra de “li” que significa “etiqueta o ritual”), y de “qi” (“materia vital”). Todos los fenómenos físicos y psíquicos se forman cuando el li se combina con el qi y proporciona una pauta. Las variaciones de la forma dependen de los diversos grado de pureza del qi. Al reafirmar la creencia menciana acerca de la bondad esencial de los seres humanos, los neoconfucianos afirmaron que el mal surgía del qi impuro que enturbiaba el li.
Según el pensamiento neoconfuciano, en el universo existía una unidad esencial gracias a la gran, indiferenciada y pura fuente del Gran Esencial, que es la agregación de todo qi. Los seres humanos deben esforzarse por reclamar su bondad original “limpiando el espejo de polvo”: quitar el qi impuro para poder así ver el li verdadero y discernir su conexión con el cosmos. Esta realización podía obtenerse mediante un “sentarse tranquilo” (jing zuo), una práctica que concentra la mente y que se vio muy influida por las tradiciones de meditación budista y taoísta.

[2] HISTORIAS DE SEXO Y MEDICINA
Jingpingmei es una novela erótica de finales del período Ming. Está ambientada en el siglo XII d. c, y explica gráficamente las hazañas sexuales de un funcionario menor llamado Ximen Qing, sus seis esposas y numerosas sirvientas. Supuestamente proporciona una justa imagen de las complejas prácticas médicas del mundo de finales del siglo XVI en el que vivió el autor.
El grupo más amplio de médicos que se ocupan de la familia ficticia son galenos letrado que practican una medicina clásica: toman el pulso y escriben detalladas recetas. También hay especialistas religiosos masculinos que prescriben píldoras, realizan cálculos adivinatorios y se comunican con los espíritus.
Las mujeres tienden a preferir los oficios informales de la abuela Liu (que toma el pulso y prescribe medicinas, pero que también dirige rituales de posesión), así como de comadres y monjas budistas que proporcionan hechizos, pociones y consuelo espiritual.


[3] Por muy oficial y empírico que pueda parecer este informe uno no puede evitar darse cuenta que sigue siendo un cuento chino. Las brechas rural- urbana y la desigual distribución de riqueza entre estos dos extremos hacen difícil imaginarse tal transformación milagrosa en tan solo cuarenta años. El plazo parece muy limitado. Los expertos que trabajaron sobre este informe tienen razón en lo siguiente: China es un país en pleno desarrollo económico. Aunque en los últimos años ha hecho progresos extraordinarios todavía le queda un largo camino para alcanzar la media de los países desarrollados. La consecución del Estado del bienestar sería como dar una vuelta muy larga y arriesgada en vez de la línea recta que llevaría a la prosperidad. La política del gobierno chino se ha caracterizado siempre por la búsqueda del mejor resultado, de la forma más directa, sin importar el precio social que pudiera representar dicho resultado. ¿Porque iban a arriesgarse cuando la meta parece tan cercana? En otras palabras, el Estado del bienestar no les conviene si quieren seguir el camino del desarrollo. Además los demás países desarrollados no vieron aparecer el Estado del bienestar hasta bien entrados en la modernización, este todavía no es el caso de China. Todavía tiene que estabilizarse su economía, solo entonces, podremos hablar de medidas sociales. En estos últimos años les ha ido muy bien económicamente justo porque han pasado por alto las condiciones de lo humanamente soportable en cuanto a condiciones de trabajo y los derechos humanos. Esta es la amarga receta de su éxito. La historia antigua de China tampoco se libra de sus hábitos poco saludables pero efectivos de progreso, solo tenemos que recordar que la muralla china, signo de orgullo nacional y patriotismo, se construyó a precio de miles de vidas humanas y reposa sobre kilómetros de huesos humanos. Otro ejemplo sería el espectacularmente desastroso salto adelante que provoco una de las peores hambrunas de la historia de la humanidad. Las zonas rurales se quedaron literalmente calvas porque la gente se comía toda la vegetación, incluidos los troncos de árboles. Cuando ya no quedaban árboles comían el barro seco, 24 horas más tarde se morían todos por hemorragia interna masiva. ¿Como olvidar estos hechos? ¿Cómo creerles a las autoridades chinas después de todo lo que han hecho? La actual situación de los trabajadores, como ellos mismos la describen, es la de un campo de entrenamiento militar. Existen en China, las llamabas ciudades-fábrica donde los trabajadores viven por y para el trabajo. Duermen en dormitorios comunes, a menudo varias personas en una misma litera, comen en el suelo en unos cuencos de aluminio, trabajan más de 15 horas al día...y todo por un salario medio de 50 dólares al mes. Pero mientras nadie se queje el sistema seguirá funcionando, y aunque se quejen existe una potente maquina represora en manos del gobierno para paliar estos brotes de la verdad. Aparte de todo esto, no hay que olvidar que el gobierno chino confunde sistemática y deliberadamente la propaganda con informes oficiales. Los datos que aparecen en el citado informe son más que cuestionables. (comentario añadido por Karina Priakhina)
[4] Fred Bergsten, Bates Gill, China what the World needs to know about the emerging superpower. The balance sheet. Ed: Public Affairs tm. New York 2207
[5] Michael Backman, The asian insider. Unconventional wisdom for asian business. ED. Palgrave Macmillan 2004 UK
[6] L. Fernandez-Stembridge, Routledge Curzon, China Today, Economic reforms, social cohesión and collective identities. Ed Taciana Fisac, New York 2003